Las gemelas

Comenzare el relato de las tres gemelas o mas conocidas como trígemelas, quienes a través de la historia fueron adquiriendo distintas formas y como todo relato oral pasado a través del tiempo la fantasía, se mezclo con la realidad, cada uno de nosotros, podrá o no corroborar la historia y darle la veracidad que corresponda; tratare de no apartarme de la cronología de la historia, varias son las versiones con respecto a su nacimiento, se dice que su madre pertenecía al grupo de ninfas-esmeraldas, debido al color verde de sus ojos; de su padre, se cree que era un aventurero, que al enterarse que se encontraba embarazada de las tres gemelas, huyo sin detenerse...
La historia, dice que tenía un hermano mayor, Yeiyabel. El décimo combatiente de un grupo liderado por el mago alquimista, caballero de la Orden del manto blanco, líder de un famoso grupo de combate. De los nombres de estas niñas fueron cambiando a través del tiempo, se cree que son inmortales, dado su origen celestial, por ende es muy posible que en épocas actuales, sigan alborotando la vida de sus padres, o responsables...
Nacieron en lapso total de cinco espacios de una hora, la primera nació antes de la puesta del sol, en ese momento se desato una tormenta de ribetes fantásticos y vientos huracanados, que arrancaba grandes árboles de cuajo; el mar parecía decidido a arrasar el mundo, las copas de los árboles mezclado con el viento emanaba una música celestial que desgarraba el alma, todo era color azul muy oscuro, nubes tremendas cargadas de rayos y relámpagos... Se dice que la señora de las tormentas, consideraría como su preferida a la criatura por venir...
Nació una niña hermosa, la llamaron Storm, “La que esta en el Acantilado”, generaciones posteriores, afirman que los marinos en alta mar en noches de tormenta invocaban el nombre de la niña y la tempestad como por arte de magia desaparecía... También, se dice que en agradecimiento a Storm, los marinos silbaban una melodía exactamente igual al sonido que sale de la copa de los árboles en noches de borrasca...

En solo tres espacios después nace la segunda niña, si bien era igual a su hermana, la tempestad, desapareció inmediatamente saliendo un sol brillante, espléndido, maravilloso... Como si se asociara o estuviera de acuerdo con el nuevo integrante, dicen que los habitantes, cantaron loas a la niña, Cahetel, “La dulce, la de los pies descalzos” fue el nombre de esta segunda niña... Oráculos y profetas, le auguraron que era distinta, y que a través de los tiempos, se convertiría en la enamorada inmortal, seria una mezcla de Hada, Ninfa princesa y que su nombre a través de los tiempos seria sinónimo de dulzura sin lugar a duda seria una niña diferente, generaciones posteriores cuentan que un gran dramaturgo de la Britania se inspiro en la Ninfa Cahetel dando vida, a un relato de amor inmortal llamado, Romeo y Julieta; novela que aun día perdura... Siguiendo con Cahetel, existe un relato que el sol estaba muy preocupado, debido a que había extraviado uno de sus rayos, a sus oídos llega el rumor que dicho rayo, la tenia en su poder una niña que residía en tierras bajas. Inmediatamente el astro rey, ordeno a uno de sus carruajes dorados conocidos como Merkabah, que bajara inmediatamente y averiguara que de cierto era el rumor; majestuoso fue ver el desplazamiento del enviado del astro rey, bajo del cielo hasta colocarse a metros de la vivienda. Iluminando todo el paraje; simultáneamente, desde el interior de la choza, se escucha un llanto de recién nacido, y un halo de luz se dirige al enviado celeste, el mensajero del sol sonrió, ya le transmitiría al gran astro que su rayo de luz estaba en la tierra, y que estaba señalada a Iluminar a los suyos y a un grupo de jóvenes guerreros...
Con el nacimiento de la tercera, hubo un hecho por demás confuso nunca aclarado, la niña, exactamente igual a sus dos hermanas, tardo en nacer alrededor de dos espacios mas, cuentan que los astrólogos de la época, quedaron sin palabras, debido a que la luna por espacio de esos minutos: dejo de girar, se quedo completamente quieta... Espantados, ante tal fenómeno, no sabían que hacer; extrañamente al enfocar al satélite, con el mira lejos, se veía claramente, como si tomara vida y su faz dibujaba una enorme sonrisa de gran felicidad... La misma, que toma una madre al ver por primera vez a su hija recién nacida. Todo esto duro exactamente dos espacios de una hora. Sabios Magos y Alquimistas de la época, lo consideraron una gran eventualidad, parecía como que los elementos adoptaran a cada una de las gemelas. Estos sucesos no fueron casualidad, en relatos posteriores, se sabrá de la gran importancia e incidencia que tendrían en la vida de las niñas; a esta última la llamarían Mariel, “La que vino del valle donde habita el Lobo”.